Ley de la gravitación universal.

El Padre-Amor le ha otorgado al ser humano un potencial de virtudes y características de las que no es consciente. Por lo general sólo reconoce la inteligencia de la mente, pero también es capaz de desarrollar dos tipos de inteligencia superiores, la inteligencia emocional y la inteligencia espiritual que le van permitiendo abrir más su consciencia. La apertura de consciencia en un ser se manifiesta porque va comprendiendo cada vez más las leyes de la creación, con un enfoque espiritual y no material... Nuestros sentidos son incapaces de reconocer que la Tierra es redonda, sin embargo han existido personas muy inteligentes que han intuido su redondez y sus movimientos, y otras que han sido lo suficientemente observadoras para notarlo. Algunos filósofos griegos antiguos intuyeron que la Tierra era redonda y se desplazaba en torno al sol. Eratóstenes calculó con mucha precisión su circunferencia, sin embargo, para la mayoría de los griegos la idea que la Tierra fuera redonda y que girara alrededor del sol con rocas, seres y nubes se consideró siempre herética. En otra época los marineros observaron que la Tierra era redonda y por tal motivo Cristóbal Colón propuso a los reyes españoles una ruta alterna de llegar a la India navegando hacia el occidente. Desde luego, Cristóbal Colón y otros navegantes sabían que la Tierra era redonda pero se trataba de mantenerlo en secreto para obtener ventajas comerciales y de conquista sobre otros países.

En 1487 Bartolomé Diaz logró dar la vuelta al cabo de Buena Esperanza y en 1497 Vasco de Gama logró llegar hasta la India siguiendo la ruta de Bartolomé Diaz. Sin embargo, Fernando de Magallanes inició en 1519 un viaje increíble, usando 3 barcos más destartalados que buenos, para darle la vuelta completa a la Tierra. Este intrépido viaje culminó en 1523 al mando de Juan Sebastián Elcano, ya que Fernando de Magallanes murió durante la travesía… Esta época de descubrimientos y viajes épicos a lo desconocido nos muestra que había gente que sabían que la Tierra era redonda pero no se explicaban el cómo ni el porqué; intuían que existía algo desconocido que mantenía todo pegado a su superficie y que debería tener una gran magnitud para que océanos, rocas, aire y todo objeto lo atrajera hacia ella.

Nicolás Copérnico terminó en 1530 su obra “Sobre las Revoluciones de los Orbes Celestes” que proponía poner a la tierra como un planeta más que gira alrededor del sol junto con los planetas entonces conocidos: Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno dando un golpe de muerte al sistema mecánico de Tolomeo que tenía a la Tierra inmóvil como el centro del universo y que había regido por varios siglos. En 1616 el santo oficio condenó el sistema Copernicano como falso y opuesto a las sagradas escrituras, sin embargo, varios hombres de ciencia apoyaron la hipótesis heliocéntrica entre los que destacan Johannes Kepler que en 1609 publica su “Astronomia Nova” donde en base a las observaciones de Tycho Brahe describe las 2 primeras leyes que llevan su nombre, y en 1626 culmina su obra con el descubrimiento de la tercera ley. Galileo Galilei con el uso de un telescopio logró ver 4 lunas de Júpiter, constatando así la validez del modelo Copernicano, y por tal motivo fue condenado en 1633 por el santo oficio.

Isaac Newton fue un hombre que tuvo mucho interés en la investigación experimental de la naturaleza. Concebía un universo donde la voluntad de Dios Creador habitaba y se manifestaba dando a la existencia un orden cósmico. En 1685 Isaac Newton comprobó la validez de la ley de la gravitación universal descubierta por él con una aplicación al caso de la luna. Esta ley establece que dos cuerpos se atraen con una fuerza que es directamente proporcional al producto de sus masas e inversamente proporcional al cuadrado de la distancia que los separa, dicho en una fórmula esto es:

F α M₁ x M₂

.            d²

Con esto quedaba resuelto el misterio de la redondez de la Tierra, sin embargo no fue hasta 1797 que otro inglés llamado Henry Cavendish llevara a cabo un experimento para quitar el símbolo de proporcionalidad “α” de la fórmula y sustituirlo por uno de igualdad calculando la constante G de proporcionalidad:

F = G x M₁ x M₂

.                  d²

donde G se puede calcular conociendo los demás valores:

G = F x d² .

.      M₁ x M₂

Las características principales del experimento del señor Cavendish consistieron en determinar las fuerzas de atracción entre dos pares de esferas de plomo por medio de una balanza de torsión y a partir de estas mediciones calcular el valor de G. La figura, al inicio del presente artículo, muestra un diagrama del aparato. Una varilla de unos 2 metros de longitud es sostenida en su centro por un alambre “P”. En los extremos de la varilla se colocaron dos esferas de plomo m₁ y m₂ de unos 5 cm de diámetro cada una. Dos esferas de plomo M₁ y M₂ con diámetros de unos 30 cm también están colocadas a cada lado como se indica en la figura. La atracción gravitacional entre m₁ y M₁ y entre m₂ y M₂ hace que la varilla girase un pequeño ángulo y se detuviera en alguna posición como la señalada con la línea continua del diagrama.

El cambio de M₁ y M₂ a los lados opuestos de m₁ y m₂ obliga a la varilla C a girar a una nueva posición indicada por la línea punteada del diagrama. El ángulo a través del cual gira la varilla era medido por la reflexión de un haz de luz desde un espejito “R” sobre una escala distante “T”. Por experimentaciones previas de la rigidez del alambre “P” y por la medida del ángulo de rotación se puede calcular la fuerza “F”. Si conocemos los valores de las masas y la distancia que están separadas, se puede calcular la única incógnita G.

G = 6.66 x 10^-8 cm³ / g seg²

Esta constante tan pequeña sugiere que las fuerzas de atracción entre objetos comunes sean imperceptibles a nuestros sentidos aun cuando sean masas muy grandes, sin embargo si observamos con detenimiento el experimento de Henry Cavendish de la figura surge una pregunta ¿de dónde sale o qué proporciona la energía para mover las esferas? Parece que sale de la nada…

Reflexiona… Repasando nuestro concepto de trabajo, podemos determinar que en este experimento se está ejecutando un trabajo y por ende se está manifestando una energía.

La fórmula para calcular el trabajo es la siguiente:

W = F x d

El trabajo, “W” es igual a fuerza, “F” por distancia, “d” donde en este caso, la fuerza es la fuerza de gravedad entre las esferas y la distancia es la que separa a las esferas pequeñas de las grandes… Sólo la energía es capaz de mover algo… ¿Qué o Quién suministra la energía que hace que las esferas se muevan?... Sólo son esferas de plomo, materia inerte… ¿Por qué se atraen?... Porque por sí solas se atraen, no hay más… Ningún científico del mundo puede explicarlo… Expondrá teorías… pero la Verdad la ignora…

La energía gravitacional es una manifestación de la ley de la gravitación universal, una ley de la creación, que en el plano dimensional del tiempo y el espacio es fundamental y por lo tanto, es tan básica que es muy fácil comprobar su existencia; se aplica a toda la materia, inclusive a toda la materia estelar de una galaxia que gira alrededor de un agujero negro. Las leyes de la creación son la tercera persona de la Trinidad, es Dios Espíritu de la Verdad… Es Dios, el Padre-Amor, manifestado en el universo físico… cada ley de la creación, al venir del Padre-Amor tiene vida y tiene personalidad. No son leyes inertes, cómo los científicos piensan que son... La energía gravitacional es ignorada por la ciencia como energía, porque no tiene forma de explicarla, sólo habla de la fuerza… Es una de tantísimas leyes de la creación, que el ser humano es completamente incapaz de explicar su verdadero fundamento… La mayoría de las leyes de la creación no son perceptibles a los sentidos humanos y no imaginamos siquiera que existan… Vemos la manifestación de algunas leyes y las aceptamos como algo que así es, pero el ser humano es incapaz de explicar el cómo y el por qué… Por ejemplo, la ley de la inercia… ¿Cómo o por qué la materia puede “saber” si está en reposo o en movimiento y resistirse al cambio entre un estado y otro?... ¿Cómo explicar que el espacio es generado por la masa? Si no existe masa, no existe espacio… El tiempo es otra gran incógnita para la ciencia ligada también a la masa. No hay masa, no hay tiempo… Dependiendo de la masa es el espacio y el tiempo, por eso estos conceptos son relativos… Pero y ¿qué es la masa si está compuesta principalmente de vacío?... El vacío que existe en cualquier átomo, entre su núcleo y los electrones que giran a su alrededor, es inmenso… reconozcámoslos con humildad el ser humano ignora la Verdad… no puede explicarlo…

El ser humano ha aprendido a usar ciertas leyes de la creación pero ignora todo sobre ellas… La ciencia del ser humano en realidad, explica casi nada… Se basa en suposiciones y teorías… invención de partículas, bosones, positrones, neutrinos, fotones, gravitones… con características inverosímiles… que tratan de explicar muchos fenómenos naturales… y que sólo hacen todo más complicado… Una teoría puede explicar un fenómeno natural, pero no funciona en otro, por ejemplo, el fotón… Y pasa esto, porque la ciencia no reconoce a la Fuente del Todo… del T o d o… al Padre-Amor. Aun cuando el mismo científico se maravilla de la inteligencia que subyace en todo lo creado y aún más, también se maravilla de la belleza de la creación, no quiere concebir que sin lugar a dudas Alguien lo creó… y se empecina en tratar de dar explicaciones ignorando al Creador… generando toda clase de teorías, tomando como fundamento que todo es automático, autónomo… sin Dios… no existe nada atrás… que el azar o la selección natural, es el gran creador…

La Fuente es sólo accesible a través del corazón, no a través de la mente, porque es una Fuente de Amor… Y este Amor de la Fuente se manifiesta en forma de energía… Energía viva que crea, que mueve y da vida, belleza, equilibrio, sustento, control, coherencia e inteligencia a todo lo que existe en este maravilloso universo…

Con respeto, y reflexionando sobre los logros hasta ahora alcanzados por el mundo científico, reconozcamos que el esfuerzo científico por tratar de comprender las leyes, no ha tenido los resultados esperados y esto, sólo mantiene al ser humano desviado del camino de la Verdad… La ciencia sólo llega a callejones sin salida… sólo teorías, suposiciones, modelos… La curiosidad científica es correcta, la curiosidad es una ley amorosa pero hay que ejercerla de manera correcta, con respeto y humildad, reconociendo ante todo al Creador… Reconozcamos con humildad que el ser humano es un ser espiritual pequeño, está en el principio… El ser humano tiene tan sólo algunos miles de años en la creación… es prácticamente nuevo, reciente… El universo tiene miles de millones de años de creación… ¿Qué puede representar la existencia del ser humano en el universo?... Sólo, que es pequeño y está en el principio, sin la inteligencia ni la consciencia para comprender la creación… El principio, lo que va primero, es el Amor, el Padre-Amor… Antes de querer comprender y explicarse el cómo y el por qué de las leyes creadoras, el ser humano debe trabajar las leyes amorosas, llenarse de mucho amor por la creación, por todo ser creado… y mucha humildad para mantener el ego controlado… Es muy importante comprender que esto es primero… Después, el mismo Padre lo irá guiando para que avance y vaya conociendo todas las demás leyes de la creación…