Serenidad

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Serenidad

¿Qué es la serenidad?

Es una de las leyes amorosas que me indica mi grado espiritual; hasta dónde he avanzado en el sendero  Esperanza - Fe - Confianza - Rendición; la serenidad me representa a mí... es una marcación de mi personalidad, por tal motivo, permite reconocer la verdadera personalidad de mi ser. Llegarla a dominar completamente requiere mucho tiempo y por tal motivo es un gran reto... Hasta dónde soy capaz de experimentar y transformar correctamente en amor las vivencias dolorosas y traumáticas de mi vida; son en las situaciones complejas, donde se manifiesta en su verdadera dimensión, el espíritu de quien las experimenta... ¿Cómo reaccionaría después de una violación?... ¿Cómo reaccionaría en una banca rota, ante un incendio o un terremoto donde pierdo todos mis bienes adquiridos por toda una vida de trabajo?... ¿Cómo tomo la muerte de un hijo querido, la muerte de mi esposa o de mi esposo?... ¿Cómo reaccionaría si soy liberado de un secuestro donde fui torturado?... ¿Cómo reaccionaría ante el diagnóstico que mi hijo de 5 años tiene cáncer y le pronostican no más de 3 meses de vida?... Unos se deprimen, otros enloquecen, otros se angustian, otros se suicidan, otros se enferman, otros culpan a Dios y rompen su lazo con Él... Solamente, cuando se ha logrado vivir todo el sendero manteniéndose en el estado de rendición, es cuando el ser logra la serenidad total y transformar cualquier experiencia traumática en amor, reconociendo que el Padre-Amor no ha enviado ninguna de esas experiencias, sino que son el resultado de la obscuridad que se ha dado en este planeta... Es reconocer sin lugar a ninguna duda que el Padre-Amor es Real, es Verdadero, es Abundante, es de Paz, es Bondadoso, es Misericordioso, sin capacidad alguna para dañar o castigar.

 

La serenidad es el triunfo del Amor y la sincronicidad con el universo. Es un estdo de conciencia muy elevado para llegar a mantenerme tranquilo, confiado, rendido al Padre, con paz interior, ante situaciones que se presentan en mi vida y que no puedo cambiar; en situaciones y circunstancias que están completamente fuera de mi capacidad para resolver o evitar. Es vivir con la certeza que no existe motivo para ofenderme, ni para irritarme, ni para quejarme, ni entristecerme, ni para tener miedo a algo o a alguien. Es plena comunión y conexión Trinitaria.


La rendición significa transformar toda experiencia dolorosa en Luz, porque todo es parte de un plan divino universal, lleno de inteligencia, amor y misericordia; saber que estoy en las mejores manos, en las manos amorosas del ser que me creó y que dispone toda la abundancia ilimitada para mi crecimiento hacia Él. Esta certeza me lleva a no cuestionar al Padre-Amor, a eliminar todo tipo de conflicto mental o sentimental por cualquier experiencia dolorosa que yo viva. Me rindo al Padre porque sé que de Él sólo puedo recibir Amor. Por la rendición a Él he saneado todo mi ser; se elegir sólo las acciones que son correctas en mi vida.

La serenidad es una parte muy importante de la personalidad.


¿Por qué es importante?

Porque me da certeza que por muy grotesco que se vea una situación, el Padre tiene el control del todo. Si el Padre-Amor permite la obscuridad en este planeta, es porque subyace una gran inteligencia, un plan divino Amoroso-Misericordioso que yo desconozco; soy muy pequeño para comprenderlo... pero el Padre sabe, yo solamente me rindo a Él.

Porque reconozco que no vine a luchar contra el mundo para hacerlo mejor. El que quiera perder su vida, la salvará.

Porque reconozco que las leyes se encargan de equilibrar todo y se genera un resultado de correspondencia.

Porque manteniéndome sereno se allana el camino, se resuelven los problemas, porque me conecto con el amor del Padre.

Porque la serenidad es una vibración muy alta que contagia a otros. Muy útil al enfrentar situaciones difíciles y críticas.