La inteligencia del Corazón

¿Sabías que el corazón tiene neuronas?

¿Y que en estas neuronas se manifiesta una inteligencia independiente de la inteligencia del cerebro?

A esta inteligencia se accede por medio de la intuición y es superior a la inteligencia que se desarrolla en nuestro cerebro por medio de la razón.

Estos conocimientos recientemente descubiertos por la ciencia hacen pensar que la espiritualidad es algo real y verdadero... Pero la ciencia, que niega la existencia del Padre Creador, de la Fuente, está totalmente limitada para poder dar una explicación correcta a este respecto...

El espíritu de todo ser consciente es una personalidad, es independiente del cuerpo y tiene una naturaleza eterna... El espíritu entra en el cuerpo en el momento mismo de la concepción y se asienta en la glándula pituitaria desde donde influye en los caracteres fisiológicos y psicológicos del ser humano... El espíritu va guardando las experiencias cotidianas en un proceso que se lleva a cabo mientras dormimos, día tras día y vida tras vida que vivimos. Tiene una memoria que se le llama el inconsciente. Si el espíritu es eterno, entonces el propósito único de la existencia humana es crecer espiritualmente... y esta inteligencia que vive en el corazón de cada ser humano es la llave maestra para lograrlo...

Clio nos explica perfectamente quién es esta inteligencia, ya que los seres de la obscuridad que han negado el Amor y se han establecido en este planeta desde hace 13,000 años, se han encargado por todos los medios que el ser humano siempre lo ignore… La intuición tiene una naturaleza yin, por eso se desarrolla más fácilmente en la mujer. Este es el motivo que explica porque, los seres de la obscuridad, han influenciado fuertemente en la humanidad para que la mujer, de casi todas las épocas y culturas, sea reprimida, limitada e ignorada.

La inteligencia que vive en el corazón humano es el Espíritu del Amor y la Verdad, la Tercera Personalidad de la Trinidad, es una inteligencia Viva… con Vida… es Luz…

Es una energía tan pura y poderosa que protege las células del corazón de tal forma que no pueden mutar en células cancerígenas. El corazón es el único órgano del ser humano que no contrae la enfermedad espiritual del cáncer.

Jesús derramó el Espíritu del Amor y la Verdad el mismísimo día de su ascensión el día 18 de Mayo del año 30, fecha equivalente a nuestro calendario actual.

De continuo se lo estuvo diciendo a los apóstoles… que el día de su partida definitiva les iba a dejar un espíritu acompañante que les daría seguridad y confianza para promulgar el evangelio del Amor...

Este hecho está registrado históricamente... pero la historia no registra que los apóstoles no fueron los únicos que recibieron este espíritu acompañante...

"Lo recibieron todos los seres humanos"

De todas las latitudes y de todos los continentes... Africanos, asiáticos, americanos, europeos, australianos... Todos los seres humanos lo recibieron, todos fueron incluidos, sin ningún tipo de distinción y todos los corazones fueron transformados con esas neuronas que son necesarias para que la inteligencia del Espíritu del Amor y la Verdad se manifieste.

Jesús dejó el Espíritu del Amor y la Verdad en cada corazón humano como una protección super-poderosa contra la influencia de los seres de la obscuridad y los preparara espiritualmente para cuando el nuevamente regrese.

Pero para acceder a esta inteligencia del corazón, es necesario que primero el ser humano trabaje la ley amorosa de la humildad...

Esta ley le permite al ser humano mantener controlado el ego que se genera en la mente del ser humano... La intuición y el ego son mutuamente excluyentes... Si hay ego nunca accederás a esta inteligencia... y si la accesas, a través de la intuición, es porque el ego está bajo control...

La ley amorosa de la humildad nada tiene que ver con la pobreza... Puede ser humilde una persona que viva en una casa hermosa llena de jardines... y puede tener el ego muy activo una persona que viva en un jacal...

Clio nos ha desglosado la ley amorosa de la humildad en 7 leyes para trabajarla más fácilmente y de forma correcta...

1. Honestidad

2. Propósito

3. Autoestima

4. Agradecimiento

5. Aspiración

6. Reconocimiento

7. Creatividad

Sin embargo las tres primeras leyes se llevan el 70% del trabajo...

Es ser honesto contigo mismo tomando conciencia de tus fallos y carencias amorosas... Esta parte es la más difícil porque existe la tendencia a auto-engañarse, a justificar los errores, a culpar a otros, a tener compasión de uno mismo, a cerrarnos para ver sólo nuestro punto de vista...

El propósito te permite tomar acciones para cada una de tus carencias amorosas y poder corregirlas. Tienes que desarrollar acciones que te permitan mantener el ego bajo control aplicándolas en cualquier circunstancia que se presente en la vida.

La autoestima te lleva a valorar el trabajo que estas llevando a cabo en tus propósitos. Te valoras ya no por tus logros materiales, sino porque te vas transformando en un ser de amor... que acepta, que comprende, que es prudente, que es tolerante, que es flexible, que es humilde.

Si reflexionamos sobre todo esto comprenderemos que el gran drama que vivimos en este planeta es porque el ego es lo que más se manifiesta en el ser humano... Y por ende es imposible que se deje guiar por la Verdad que vive en su corazón... No tiene acceso a esa Luz que lo guiaría con total certeza en su vida... Y lo más lamentable es que los seres de la obscuridad han tomado todas las ventajas de esta desconexión de los seres humanos con el Amor para expandir su obscuridad.

Y ahora, en este cierre de ciclo, es lo que más se manifiesta... Y no lo podemos comprender.

Si el ser humano accesara a la Verdad de su corazón no necesitaría de religiones, ni de libros sagrados, ni de sacerdotes para interpretarlos... El sabría que es espiritualmente correcto.

Ni de políticos y ni de sistemas judiciales... El siempre sabría comportarse socialmente de forma correcta bajo cualquier circunstancia de la vida.

Ni de ejércitos ni guerras... El respetaría a todos los seres humanos de toda raza y toda nacionalidad.

Tampoco necesitaría de medicamentos ni de sistemas de salud... El sabría cuidar correctamente de su cuerpo, de sus pensamientos y de sus emociones...

Conocer esto nos ayuda a tener la certeza que efectivamente existe una Luz que nos guía y que está en nuestro interior... Es la misma Luz del Padre-Amor. Es la puerta que nos conecta con Él, otorgándonos la garantía de vivir en la perfección, al cobijo de su amor... en armonía con toda su creación...