Flexibilidad

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Flexibilidad

¿Qué es la flexibilidad?

Es trabajar en tener una mente abierta. Es aceptar opiniones diversas sin entrar en conflictos mentales, ni emocionales. Es aceptar la diversidad.


La flexibilidad tiene un fundamento espiritual y es la dualidad. La dualidad es equilibrio y complemento. Es lo masculino, yang y lo femenino, yin; es lo mío y es lo de los demás; es el principio y el fin…


Yang, lado derecho. Trabaja el hemisferio izquierdo de mi cerebro; es la fuerza, la actividad, la disciplina, la razón, la seguridad, es lo externo, es lo activo, es lo lógico, es lo matemático, es lo preciso, es la potencia, es la energía…


Yin, lado izquierdo. Trabaja el hemisferio derecho de mi cerebro; es el amor, es la ternura, es la paciencia, es la intuición, es lo interno, es lo pacífico, es lo delicado, es la comprensión, es la creatividad, es la tolerancia, es la sensibilidad, es la belleza, es la Luz…


Para ser flexible, si soy yin debo trabajar para desarrollar mi parte yang. Si soy yang trabajo para desarrollar mi parte yin. Esto es, uso los 2 hemisferios de mi cerebro.

En la práctica diaria trabajo mi yin cuando doy un trato amable, tierno, honesto, tolerante, comprensivo y amoroso a todos, humanos y no humanos. Esto es lo que va primero, lo complemento con mi trabajo yang que es el servicio que presto a los demás con energía, con compromiso, con disciplina y con entrega; es mi trabajo cotidiano para vivir. El sistema armónico del planeta está roto, porque la mayoría de los seres humanos no trabajan de esta forma, esto tiene como consecuencia un sistema enfermo. Cuando me comprometo a trabajar de forma correcta mi flexibilidad, ayudo a sanar el sistema; me comporto como un sanador.


¿Por qué es importante?

Porque me permite vivir en equilibrio.

Porque me permite vivir en armonía.

Porque me permite aceptar más a los demás.